martes, marzo 27, 2007

Cantar en coro: una maravillosa experiencia compartida



El sonido de voces blancas y puras en una perfecta afinación me produce un verdadero placer de escuchar y me confirma una vez más que asistir a este tipo de espectáculo si remueve, sacude y conecta al espíritu.

Me viene a la mente desde un comienzo un profundo sentimiento de admiración a la cultura musical del viejo continente. Niños entre los 9 y 13 años, bajo la dirección de Jeremy Walker nos ofrecen un programa de obras religiosas y profanas de gran envergadura de los más conocidos compositores desde el barroco, clásicos y modernos hasta alegres melodías contemporáneas en la segunda parte.

Un coro:
Gran aprendizaje de creatividad, sensibilidad, trabajo en equipo, perseverancia, disciplina, relaciones interpersonales, y tantas otras destrezas y habilidades que se desarrollan a través de un coro.

Sumando a ello la edad; sabemos que la niñez es una etapa de mucha receptividad al medio. Tener la oportunidad de experimentar este tipo de "entrenamiento"que fortalece a las personas y potencia en gran medida sus capacidades, es asegurarles que harán la diferencia en cualquier profesión o actividad laboral que desarrolle en el futuro.

¡Maravillosa experiencia! Me hubiera gustado ser uno de ellos en ese momento.

Pero también ir a escucharlos es de esas acciones que recomiendo hacer más seguido para alivianar la carga.

sábado, marzo 03, 2007

Viaje al Valle del Elqui








Marcela


Rebeca

Entre cerros y valles la semana pasó volando, desde la partida supe que este seria una aventura renovadora. Tenía un objetivo: descansar de verdad.

Dos dias en Vallenar; las playas de Huasco y luego el valle del Alto del Carmen, desde la playa a la cordillera bordeando los cerros a traves de los rios que son como las venas del planeta, despetaron rápidamente mis sentidos añorantes de energía y calor.

Vino entonces la canción... "Las aguas transparentes llevan las nutrientes y minerales hasta el mar".

Escuché primero el intenso e incesante ruido de las olas que al mezclarse con el viento obligan a callarse para luego internarme al valle y subir cerros y encontrarme con el origen de tan majestuoso sonido: el rio...más allá, la vertiente. Este fué el preludio del concierto. EL COMIENZO GLORIOSO.










Los siguientes dos dias hicimos el mismo camino desde la playa al valle; de La Serena a Pisco Elqui en el Valle.

El desarrollo de la obra musical se volvió tosco entre lo rural y lo comercial, sentí confusión entre el paisaje místico ensoñado y la contaminación acústica ... provocando una desarmonía entre los lugareños comerciantes y comerciantes lugareños. Los tonos tenues y misteriosos se contraponen a los bombos y platillos interpretados por los turistas y comerciantes de la región. Quise entonces sentir la tierra contemplando cerros y ver la luz mirando las estrellas y el firmamento, pero no pude.

CLIMAX: El alboroto juvenil y los tacos de la calle principal me lo impidieron. sentí turista...sonido fofo.



Pero esta obra no podía terminar así!!! Nos fuimos a Cochiguaz.

Dos dias respirando al fín en lo profundo. Al llegar al hospedaje supe porqué había ido: La melodía del encuentro de almas amigas que te reciben desde el corazón para aliviar tu cansancio, me calma entonces escucho el fluir del agua cristalina entre árboles y pastos verdes, entre mantras e inciensos meditamos, las noches estrelladas con los ojos cerrados y abiertos me iluminan.

Se siente la cumbre del viaje, se siente el planeta cuerpo, se siente un maravilloso final de concierto.