jueves, marzo 31, 2011

La música, un lenguaje vivencial


El cómo interpretar al compositor de obras musicales, es la pregunta que muchos auditores nos hacemos al momento de escuchar música. Para darnos una respuesta, tenemos que disponernos a investigar a "la persona" que hay detrás de esas notas; su vida, su historia desde las diferentes perspectivas: la vivencia del compositor queda impregnada en su obra, tal como lo afirma Claudio Naranjo en esta charla ofrecida para estudiantes de la Universidad de Madrid.


Las palabras de Claudio Naranjo me hacen recordar mi propia experiencia musical escolar , la educación musical que se ofrecía en los colegios durante los últimos años de estudios (antes, humanidades, hoy enseñanza media), estaba enfocada a favorecer la audición dirigida a los estudiantes. Entonces los profesores apoyados con libros y cintas o discos, nos daban mucha información  de los grandes  compositores clásicos junto a la audición de sus obras. Generalmente estas eran clases muy aburridas porque todo este conocimiento se hacía de manera muy superficial y los contenidos eran pobres y sobretodo mal contados.

Claude Debussy, compositor de "Claro de Luna"
La vida de un artista está llena de fervor y devoción a su trabajo, son personas muy sensibles a la "realidad" y que sufren y aman intensamente. Nada de esto se sentía en esas clases de "audición dirigida", disfrutaba, eso si, el hecho de poder relajarme y hasta pestañear un poco, efectos de la inactividad o a mi actitud pasiva como alumna. Finalmente decido cambiárme a "artes" que era por el contrario, una clase aunque también bastante "dirigida", al menos uno hacía o construía un material visual utilizando la imaginación y las manos... verdaderas obras de arte.

Hoy ya no es audición musical dirigida... sino que audición activa. Yo te invito a escuchar música y tú decides qué camino tomar... imaginar historias y relatos, o simplemente moverte con el cuerpo mientras la escuchas (o ambas) creando una espontánea coreografía, o ponerte en contacto con ese compositor y de acuerdo al conocimiento que tengas de sus vivencias... instuir y alimentarte de su mensaje emocional.


La música es un potente vehículo emocional; te conectas con las vibraciones de los sonidos que penetran en tu interior... tu cuerpo entero se mueve, conmueve y te remueve. Ponerte en sintonía con las emociones del compositor y dejarte llevar por su vivencia, es también para tí una manera de liberarte de las tensiones y encontrar un mecanismo propio de expresión y conexión contigo mismo.

lunes, marzo 14, 2011

Dejando entrar los sonidos al cuerpo

Quisiera proponer una actividad para comenzar la lectura de este posteo.
Escucha esta pieza musical (ojos cerrados) y  luego de la audición, piensa unos momentos y elige entre las 3 alternativas que siguen, cual se ajusta mejor a la sensación que te deja resonando en los oídos.


Découvrez la playlist Msica para escuchar avec RueiBin Chen

  1. Me conecté con sensaciones y sentimientos, percibí el carácter alegre o triste de la música.
  2. Me trasladó a un lugar, evoqué personajes, animales o situaciones, imaginé una escena o historia.
  3. Me llevó a analizar su estructura, a reconocer una secuencia melódica, diferenciar contrastes de intensidad, reconocer el creccendo, audición de sonidos cortos y sonidos largos, diferenciar timbres, audición de ritmo binario y ternario...etc
A veces me gusta visualizar la obra o pieza musical que escuchamos plácidamente sentados en el sofá, no sólo como el resultado de la acción creadora del compositor-creador, sino también de cada uno de los auditores que al disponerse a escuchar, participan con su propia interpretación de lo escuchado. El lenguaje musical es sin palabras, son los sonidos que entran al cuerpo y sus vibraciones inician y producen un movimiento de neuronas que nos colocan o no, en sintonía con ella. Lo importante es recalcar que para cada uno, este mensaje es distinto.

Los instrumentos o voces que participan con su particular sonido, forman el cuerpo sonoro en su totalidad que permanecen en un diálogo de frases musicales con preguntas y respuestas tal como una conversación con sus infinitas posibilidades de tonalidades y matices, contrastes y variaciones que este lenguaje sonoro ofrece en armonía. Me gusta la asociación que hace Francisco Varela, connotado biólogo y filósofo chileno, cuando utiliza la música para explicar el funcionamiento del cuerpo humano.



En base a esta idea de que como auditor activo, participas de este discurso y durante el, puedes recrear libremente sin normas ni juicios que limiten tu territorio imaginativo, es en principio lo que  me interesa transmitirle a las personas. Es una buena noticia que al proponerla pone en evidencia las barreras y condicionamientos que ya traemos tanto en la rígidez corporal, como la gran dificultad que tenemos para abstraernos de las preocupaciones que atrapan nuestros pensamientos en forma automática.

Es el desafío que tengo por delante, comenzando con los niños, que por su corta edad viven las experiencias con mucho mayor recepción y su sentido lúdico los transforma en hábiles constructores de cuentos encantados, llenos de fantasía y humor...es terreno fértil. Les sugiero volver a escuchar a través de este vídeo.



Personalmente esta audición de la suite compuesta por Edvard Grieg, Peer Gynt traducida al español como "En la gruta del rey de la montaña", me trasladó a un lugar con personajes que se mueven ocultos en la oscuridad. Sigilosa y misteriosamente se desplazan en la noche, luego avanzan sin ser avistados por los enemigos, logrando en los últimos instantes conquistar y tomar posición, dejando a su paso una enorme estela de fuego y humo gris, dando lugar al triunfante ingreso de estos personajes ahora transformados en feroces guerreros.

Esa es mi interpretación...¿cúal es la tuya?

Rebeca Domínguez Benïtez

martes, marzo 01, 2011

Mi primer amor...

el sentido de la audición creativa
 El sentido de la audición ha sido para mí un estímulo importante que me interesa explorar y descubro desde muy niña...mi entorno sonoro familiar que hoy observo desde la distancia de los recuerdos, reconozco como pilares de una formación acústica privilegiada: sonidos que salen del piano, el entrenamiento vocal haciéndo armonías simples bien estructuradas a varias voces desde corta edad, el hecho de nacer y vivir mis primeros años en una casa de campo invadida de sonidos de la naturaleza, me introducen a un mundo desde una perspectiva en que lo audible es  importante y lo integro a mi vida como un gran espacio propio de contenido significativo. Fué algo así como mi primer gran amor... la música.


De la música a los sonidos
En algún momento más adelante, cuando comienzo a ejercer como profesora enseñando a niños pequeños con cantos y juegos sonoros, hago un descubrimiento que me marca profundamente. Hoy lo digo emocionada porque comienzo entonces a ejercitar con ellos la distinción de sonidos por su timbre...el cómo suena cada uno por separado...la campana de la iglesia, el tráfico de la calle, los sonidos de los artefactos de la casa, el sonido del metro en la estación etc. el sonido individualizado con sus propias caracteristicas me producen una fascinación indescriptible que sin saberlo aún, me coloca en una relación sensorial, instuitiva y  mágica con los sonidos.

Al poco andar, me brota espontánemente la necesidad de investigar y empiezo a coleccionar sonidos grabados para llevar a los niños. Ellos con toda su capacidad y potencia reciben estos como regalos de cada dia, sus oídos entonces se ponen alertas y comienzan a discriminar y paulatinamente a seleccionar sus sonidos favoritos. Entonces, me di cuenta que las diferentes disposiciones a parar la oreja, es una habilidad que  traemos todos pero se potencia o debilita según  nuestro ambiente tanto familiar como sonoro. El clima psicológico que los padres transmiten a sus hijos juegan un rol fundamental , como también las caracteristicas del "paisaje sonoro" del lugar en donde ellos viven.
la caracola se nutre de los sonidos del medio ambiente tal como las personas
"La nariz ancha como el papá", "los ojos claros como la mamá", "este niño tiene cero oído porque salió a su abuela que cantaba todo en el mismo tono". Frases como estás he escuchado por años y cada vez que las oigo, se me aprieta el estómago porque siento rabia. !Cómo es posible que seamos tan tarados de pensar que un niño de 3, 5 o 9 años venga fallado en su capacidad de oír! Y lo peor, a partir de la escucha de ese niño de esta declaración brutal, su reacción natural es creerlo, claro, son sus padres los que lo dicen...la autoridad máxima y sus ídolos.
Siempre observé con pena que los niños con problemas de escucha generalmente tenian padres que no escuchaban, padres con prejuicios que comunicaban a sus hijos sus propias fallas y temores. Esto pasa mucho y es el gran desafío de los profesores  especialmente de música en la actualidad. Borrar esa barrera puede tomar años, cambiar el prejuicio por alentarlos a ejercitar el oído para abrirlos y  limpiarlos es abrirles una puerta al descubrimiento de un mundo propio de sensaciones  y emociones que los conectan directamente con su yo más íntimo y personal.


Murray Shafer, profesor universitario y compositor canadiense, es uno de esos personajes que me inspiran durante este tiempo de trabajo en la educación musical, porque él habla del paisaje sonoro, recalca la importancia del sentido de la audición para el ser humano para su propia lectura e interpretación del mundo. Los invito a escuchar a Shafer para conocer su sensible concepción del sonido y el lugar o espacio interno-externo que ocupa en nuestras vidas. "Sonidos".
Pinchando acá encontrarás también un excelente ensayo de Luis Guerrero (perú) sobre la propuesta de Murray Shhafer para la enseñanza musical.